Los pasajeros buscan su sitio en el avión y tratan de encajar sus bultos en los compartimentos sobre los asientos. Al poco tiempo, con todo el pasaje ya sentado, empieza a sonar el reconocible saludo del Comandante a través del megáfono. Como suele suceder, nadie presta demasiada atención, hasta que el piloto dice que el vuelo no va a aterrizar en el destino previsto.

Así comienza la historia que cuenta el anuncio de Navidad de Vueling, línea área propiedad del grupo IAG, que celebra la vuelta a las fiestas como eran antes de las limitaciones y restricciones de los últimos tiempos.

La creatividad de la campaña es obra de la oficina de Barcelona de McCann, que trabaja para esta marca desde el año 2016. La producción del spot es de Mamma Team y la realización, de la directora peruana Claudia Llosa.