La película se ha rodado íntegramente con un iPhone 12 Pro Max, y el equipo de Nian ha puesto el teléfono a prueba para mostrar las características de la cámara y ha utilizado Dolby Vision, su lente de baja luminosidad y ultra gran angular, el teleobjetivo, la estabilización y las funciones de time-lapse.

"Es muy emocionante que tengamos esta oportunidad de volver a contar esta antigua historia, de capturar estas imágenes increíblemente cinematográficas con el iPhone", dijo Wang. "De niño, mis padres querían que llegara más lejos de lo que nunca habían llegado. Y sin embargo, también existe ese miedo a que me adentre en lo desconocido, por lo que quise trasladar ese tema a esta película. Nos divertimos mucho tratando de averiguar dónde podemos colocar el teléfono para conseguir ángulos y perspectivas un poco más singulares. Espero que cuando el público se dé cuenta de que hemos rodado con iPhones, se sienta fortalecido. No tienen que esperar el permiso para salir y hacer cosas".