Sobre este nuevo reto que llevan adelante, Hernández-Aguilar expresa:
“Estoy muy entusiasmada y contenta al recibir esta gran responsabilidad, pero a la vez estoy tranquila porque tenemos un gran equipo que nos estará respaldando. El estar en un co-management con Checha va a ser una buena combinación, pues nos complementamos al tener habilidades y capacidades diferentes para servir mejor a nuestros clientes”.
En la siguiente entrevista con LatinSpots, el también Chief Creative Officer de Ogilvy Latina asegura que le es imposible dejar de lado en su liderazgo como CEO el creativo que lleva adentro y que, además, el mismo le permite ver las cosas de otra manera. A continuación, Agost Carreño analiza la actualidad del mercado mexicano y los requerimientos de los clientes actuales.

-¿Cuáles son los desafíos y objetivos que les planteó Horacio Genolet para asumir esta función?
-Horacio nos pidió llegar todavía más lejos, y transformar la agencia para encarar una nueva era. Venimos trabajando juntos los tres hace más de tres años. Entonces, la transición ha sido muy fluida. Estamos en el momento de mayor transformación de la industria. Es algo de lo que venimos hablando hace tiempo. Y empezamos a planear y ejecutar desde el día uno que asumimos con Vero Hernández esta responsabilidad. Han pasado dos meses y estamos convencidos de que en este lapso de tiempo, hemos instaurado una cultura que la gente ha hecho propia y es la prioridad. Tenemos un grupo de personas extraordinarias en lo humano y lo profesional. En ese orden los elegimos. Los cuidamos mucho. Y también los empujamos a ser ambiciosos, a que sueñen en grande y que le pongan la obsesión que hace falta para conseguirlo.

-¿Qué balance hace del último año para Ogilvy México?
-2016 fue un muy buen año para Ogilvy México. Un año en el que crecimos orgánicamente, ganamos importantes new business y nuestro trabajo obtuvo los reconocimientos que buscamos en Cannes, Effies, One Show, El Ojo y, principalmente, en la gente y el mercado. Hemos empezado a trabajar globalmente para marcas como Coca-Cola. Y hoy, uno de los cuatro comerciales globales que lanzó recientemente Coca (Eyes closed), nació de Ogilvy México y se verá en más de 100 países.

-¿Qué le están pidiendo los clientes hoy en México y a nivel regional?
-Por primera vez en 25 años, siento que los marketers están delante de las agencias varios pasos. He tenido la gran satisfacción de encontrarme con gente del lado del cliente brillante, mucho más preparada para lo que viene que muchos profesionales de las agencias. Estos clientes nos están pidiendo que seamos sus socios, que estemos juntos en todos los procesos desde el comienzo. Porque así podemos saber mucho de su negocio y, en consecuencia, poder pensar ideas multiplataforma para su negocio. Hoy, estamos trabajando en proyectos que involucran hasta e-commerce. Y tuvimos que buscar gente de Sillicon Valley, no de Madison Avenue.

-¿Por qué creen que los clientes eligen a Ogilvy en sus mercados?
-Creo que Ogilvy es una marca sexy, y tiene una mística que se fue construyendo con los años por la gente que trabaja en Ogilvy. Una agencia además es sexy gracias a la cultura de las ideas. Así de simple. Y lo que vienen a buscar a Ogilvy son ideas relevantes para su negocio.

-Ustedes lanzaron la auditoría de media social. ¿Cómo está funcionando?
-Nuestro Social Media Center está creciendo muy rápido. Creo que se debe a que trabajamos a la velocidad de la cultura, estando atentos a lo que está pasando en la vida de la gente, y luego lo traemos a nuestras marcas. Como siempre, el gran diferencial que tenemos son las ideas. Herramientas de Listening puede tener mucha gente, pero con buenas ideas, muy pocos.

-Con todos los cambios que viven nuestras sociedades, ¿cómo se piensa una compañía publicitaria hoy para seguir vigente?
-Hay que replantearse todo el tiempo, si lo que estás haciendo es suficientemente novedoso, fresco y relevante. Hay que tomar riesgos todo el tiempo, aún sabiendo que te podés equivocar. De otra manera, te volvés una agencia promedio. Y odiamos estar en ese grupo. Preferimos tomar decisiones que nos den miedo.

-Usted ya fue CEO de Ogilvy Chile. ¿Qué aprendizajes le dejó esa experiencia?
-A mí me empezó a ir mucho mejor cuando apliqué el “Fracaso Cognitivo”, que consiste en aprender de tus fracasos para equivocarte mejor. Después de muchos años, me di cuenta de que si no fracasás primero, no podés triunfar después.

-¿Cómo compatibiliza el liderazgo con su lado creativo?
-No voy a dejar de ser creativo porque sea CEO. Creo que ambos roles son compatibles. A mí me ayuda mucho pensar como creativo para ser CEO, y viceversa. Estoy convencido de que los dueños de las ideas tienen que tener un rol protagónico en la toma de decisiones. Hoy existen demasiados “Business people” tomando decisiones y son los que han hecho que esta industria sea cada vez menos valorada y rentable.

-¿Qué análisis pueden hacer de la creatividad mexicana?
-Vivo en México hace más de tres años y puedo decir que en este tiempo vi mejores ideas y mayores recursos puestos para hacerle bien a esas ideas. Tengo la ilusión de que la creatividad publicitaria mexicana explote como explotó, por ejemplo, el cine. Está todo lo que hace falta para que pase.

-¿Qué nos puede contar sobre el nuevo trabajo Bienvenido Pablo, para Maxim Colombia?
-Trabajamos muy pendientes de lo que está sucediendo en la sociedad en la que vivimos. Y una de las cosas que empezó a ocurrir el año pasado es la redefinición de la masculinidad. De este trend, nació la idea de Bienvenido Pablo, una historia real, fuerte y relevante para una revista como Maxim. Cuando les contamos la idea, la reacción fue: “Hagámoslo ya”.

-¿Cuáles son los planes para 2017?
-Para 2017 nos propusimos metas que apuntan a fortalecer aún más Ogilvy México porque hay que seguir demostrando todos los días que somos buenos. También nos propusimos expandir nuestra cultura a Estados Unidos, a través de nuestra oficina en Miami. Es un cluster que en dos meses ya dio excelentes resultados porque juntamos lo mejor de los dos mundos. Para nosotros, el muro es mental. Hay muchas oportunidades y sinergias en los dos mercados. Lo estamos comprobando todos los días. En Miami, nos acaban de asignar el lanzamiento global de Red Stripe, una cerveza de Jamaica, que forma parte del portfolio de Heineken Group. Este proyecto es histórico para la oficina de Miami por el alcance que tiene a nivel regional y global. Y creemos que con buen trabajo atraeremos más trabajo.