Actualidad - Alemania

Alemania lucha contra la obesidad infantil

(07/03/23). Uno de cada seis niños alemanes tiene sobrepeso. Ahora, el Ministro de Alimentación y Agricultura, Cem Özdemir, quiere prohibir la publicidad de alimentos poco saludables. Pero la industria del dulce contraataca.

Cem Özdemir, del Partido Verde, el ministro alemán de Alimentación quiere que no aparezca publicidad de alimentos poco saludables dirigida a los niños entre las 6 de la mañana y las 11 de la noche en televisión, radio e internet.

Esto también se aplicaría a los influencers, por ejemplo en YouTube o TikTok. Además, se prohibirán las vallas publicitarias que anuncien alimentos dulces, grasos o salados en colores llamativos cerca de escuelas, guarderías y parques infantiles.

"Debemos garantizar que los niños puedan crecer más sanos", dijo Özdemir al presentar sus planes en Berlín a principios de esta semana. Esto es crucial en la lucha contra la obesidad y otras enfermedades relacionadas con la dieta, argumentó, antes de añadir que se ha demostrado que los anuncios de alimentos poco saludables influyen en el comportamiento alimentario de los niños.

Pero los representantes de la industria alimentaria alemana rebaten la idea de que la prohibición de la publicidad pueda prevenir la obesidad. Uno de los críticos es Carsten Bernoth, director general de la Asociación de la Industria Alemana de Confitería (BDSI). Cuando toma asiento en la mesa de la sala de conferencias de la BDSI en Bonn para una entrevista con DW, no hay ningún plato con galletas sobre la mesa, ni ningún tentempié, sólo unas botellas de agua.

Una prohibición de la publicidad no hará que los niños coman menos dulces, dice Bernoth, y sin embargo: "La publicidad es esencial en una economía de mercado. Te permite arrebatar cuota de mercado a otros competidores".

Los fabricantes alemanes de caramelos registraron unas ventas de unos 14.000 millones de euros (14.800 millones de dólares) el año pasado, y gastaron unos 1.000 millones de euros en publicidad.

Bernoth teme que los planes de Özdemir conduzcan a una prohibición casi total de la publicidad para su industria, ya que los anuncios destinados a adultos que podrían ser vistos por niños también podrían entrar en la prohibición prevista.

"Defendemos la libertad de elección del consumidor", afirma Bernoth. "Tiene que poder elegir con conocimiento de causa. La información y la educación son fundamentales. Y no corresponde al Estado estipular nada aquí ni postular ninguna prohibición".

foto by Oliver Berg / dpalpicture alliance