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El Barómetro de confianza de Edelman revela una brecha entre la innovación y la sociedad
(16/02/24). Edelman presentó la edición 2024 del Barómetro de Confianza Edelman, se trata de la 24° encuesta anual de confianza y credibilidad de la firma. La investigación fue producida por el Edelman Trust Institute y consistió en entrevistas online de 30 minutos realizadas entre el 3 y el 22 de noviembre de 2023 de la cual participaron más de 32.000 encuestados de 28 países. A continuación compartimos lo más sobresaliente del informe que abarca una serie de indicadores sociales importantes y oportunos sobre la confianza en las empresas, los medios de comunicación, los gobiernos y las ONG.
El Barómetro de la Confianza de Edelman 2024 revela una brecha entre la innovación y la sociedad que se ha convertido en el nuevo factor causante de una mayor polarización. Los encuestados, por un margen de casi dos a uno, consideran que la innovación está mal gestionada; esto es cierto en todos los grupos de edad, niveles de ingresos y género, y tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo es más probable que la gente diga que la innovación está mal gestionada que bien gestionada. Las innovaciones también se han politizado, especialmente en las democracias occidentales, donde las personas de derechas son mucho más propensas a rechazarlas que las de izquierdas; las mayores diferencias entre los de derechas y los de izquierdas se dan en Estados Unidos (41 puntos), Australia (23 puntos), Alemania (20 puntos) y Canadá (18 puntos).
"La innovación se está acelerando y debería ser un factor de crecimiento, pero se verá obstaculizada si las empresas no prestan tanta atención a la aceptación como a la investigación y el desarrollo", afirmó Richard Edelman, Consejero Delegado de Edelman. "Más de dos tercios de nuestros encuestados que afirman que la innovación está mal gestionada creen que la sociedad está cambiando demasiado deprisa y no de forma que beneficie a “gente como yo” (69%). La división de clases, el enorme desequilibrio de confianza entre empresas y gobiernos y la infodemia han sido las fuerzas que han impulsado el declive de la confianza y el aumento de la polarización. El miedo a la innovación se ha convertido ahora en el cuarto leño en el fuego del populismo".
Las empresas tienen la mejor oportunidad de invertir esta tendencia porque son la institución en la que más se confía, tanto en general como cuando se trata de introducir nuevas innovaciones en la sociedad. Pero debe centrarse en explicar el impacto de la innovación y su efecto positivo neto para la sociedad y no sólo para los inversores. Pero no puede actuar sola. A lo largo de la última década, el Barómetro de la Confianza ha registrado un aumento de 15 puntos (del 45% al 60%) en el número de personas que afirman que, si las empresas se asociaran con las administraciones públicas, confiarían más en ellas para los cambios impulsados por la tecnología. Casi dos tercios esperan que los CEO gestionen los cambios que se producen en la sociedad, no sólo los que se producen en su empresa (62%), y alrededor de 8 de cada 10 empleados afirman que es importante que su CEO hable públicamente sobre las competencias laborales del futuro (82%), el uso ético de la tecnología (79%) y el impacto de la automatización en los puestos de trabajo (78%).
Muchos creen que la ciencia está perdiendo su independencia: frente al Gobierno, los financiadores y el proceso político. En Estados Unidos, dos tercios creen que la ciencia se ha politizado (67%) y en China, tres cuartas partes de los encuestados afirman que el Gobierno y las organizaciones que financian la investigación influyen demasiado en la forma de hacer ciencia (75%). Cuando la gente cree que la innovación está mal gestionada, es más probable que digan que el sistema está sesgado a favor de los ricos que los que creen que la innovación está bien gestionada (82% frente a 53%). Esto ha llevado a una dispersión de la autoridad, donde la gente ve a "alguien como yo" (74%) a la par que a científicos y expertos (74%) en términos de en quién pueden confiar para que les diga la verdad sobre las nuevas innovaciones y tecnologías.
"Con el telón de fondo del mayor año electoral de la historia, con más de 50 elecciones previstas, la confianza está siendo asediada por varias fuerzas", afirmó Kirsty Graham, Presidenta de Prácticas y Sectores Globales de Edelman. "La preocupación por el impacto de la innovación y por quienes la impulsan ha provocado una mayor desconfianza en los sistemas económicos y políticos. Las instituciones deben trabajar juntas para ayudar a abordar estas preocupaciones y permitir un camino para la innovación y el progreso continuos."
Otras conclusiones clave del Barómetro de la Confianza de Edelman2024 son:
El Reino Unido (39) se encuentra entre los países que menos confían según el Índice de Confianza, y ninguno de los demás países del G7 confía en: Canadá (53); Italia (50); Francia (47) EE.UU. (46); Alemania (45); Japón (39).
El temor a una guerra de la información (61%) aumentó seis puntos con respecto al año pasado, el mayor incremento entre los temores sociales. El informe también revela un aumento en la creencia de que los líderes de la sociedad, incluidos los periodistas (64%), los líderes del gobierno (63%) y los líderes empresariales (61%), intentan engañar a la gente a propósito diciendo cosas que saben que son falsas.
Ahora se desconfía del gobierno (51 por ciento) en 17 de los 28 países encuestados, incluidos Estados Unidos (40 por ciento), Alemania (42 por ciento) y Reino Unido (30 por ciento, 7 puntos menos). Los medios de comunicación (50%) siguen siendo la institución en la que menos se confía en todo el mundo, y se desconfía de ellos en 15 de los 28 países encuestados, incluidos Estados Unidos (39%), Japón (33%) y Reino Unido (31%, 6 puntos menos).
La confianza sigue siendo local: "Mi empresa" (79% de confianza entre los empleados) vuelve a ser la institución en la que más se confía y en la que más se confía en todos los países encuestados, salvo Corea del Sur (49%). Mi director general" (69% de confianza entre los empleados) también goza de más confianza que los directores generales en general (51%).
Los gobernantes (42%) se encuentran entre los líderes sociales en los que menos se confía, mientras que los periodistas (49%) y los directores generales (51%) sólo gozan de un poco más de confianza. Se confía más en los científicos (77%), los profesores (74%), "mi director general" (69% entre los empleados), los ciudadanos de "mi país" (63%) y "mis vecinos" (62%).
El informe encuentra enormes diferencias entre la confianza en las empresas que componen los sectores industriales y las innovaciones de la industria, incluida una diferencia de 26 puntos entre la confianza en las empresas del sector tecnológico (76%) y la confianza en la inteligencia artificial (50%); una diferencia de 23 puntos entre la confianza en las empresas del sector sanitario (73%) y la confianza en la medicina genética (50%); y una diferencia de 40 puntos entre la confianza en las empresas del sector de alimentación y bebidas (72%) y la confianza en los alimentos modificados genéticamente (32%).
En los últimos 10 años, la confianza ha disminuido significativamente en las empresas con sede en los mayores países exportadores, como China (de 2014 a 2024, 3 puntos menos, hasta el 30%), Estados Unidos (9 puntos menos, hasta el 53%) y Alemania (9 puntos menos, hasta el 62%). Incluso con un descenso de nueve puntos en la última década, Alemania (62% de confianza) sigue siendo la segunda marca extranjera en la que más se confía, por detrás de Canadá (64%). La marca China (30%) sigue siendo una de las menos fiables, junto con la India (32%).
TOP 10
1 - La aceptación es tan importante como la invención
Los encuestados creen por un margen de casi dos a uno que la innovación está mal gestionada (insuficiente regulación gubernamental, falta de confianza en los líderes tradicionales, desconfianza en la independencia de la ciencia respecto de la política y el dinero).
Los encuestados necesitan saber que las invenciones han sido evaluadas por científicos y especialistas en ética, que están reguladas eficazmente y que sienten que controlan el impacto en sus vidas.
2 - El círculo virtuoso de la confianza
La confianza se basa en primer lugar en la prosperidad económica, como demuestra el hecho de que los países en desarrollo tengan niveles de confianza más altos que los países desarrollados. La innovación puede impulsar el crecimiento de todos los niveles de la sociedad, lo que se traduce en una mayor confianza en las instituciones.
3 - Las empresas deben liderar la innovación
La innovación es el eje central del crecimiento empresarial. Las empresas deben liderar la innovación porque es la institución en la que más se confía: 52 puntos más competente y 32 puntos más ética que el gobierno.
4 - La sociedad cambia con demasiada rapidez
La mayoría de los encuestados que creen que la innovación está mal gestionada piensan que la sociedad está cambiando demasiado deprisa y no de forma que beneficie a la gente como yo. También preocupa que el sistema favorezca a los ricos.
5 - La IA es el campo de batalla, pero el ARNm también está en la encrucijada
Los encuestados se muestran ambivalentes ante estas innovaciones. Cuando la innovación está bien gestionada, la gente es 12 puntos más propensa a aceptar la IA y 17 puntos menos propensa a rechazarla, una diferencia neta de 29 puntos. En el caso de la medicina genética, la diferencia neta equivalente es de 22 puntos.
6 - Preocupación por la pérdida de independencia de la ciencia
El 53% de los encuestados de todo el mundo afirma que la ciencia se ha politizado en su país; dos tercios tanto en China como en EE.UU. En los mercados en desarrollo, el 63% de los encuestados afirma que el gobierno controla demasiado la ciencia.
7 - Los compañeros están a la altura de los científicos
El 74% afirma que confía por igual en los científicos y en sus homólogos para conocer la verdad sobre las innovaciones. Entre los que piensan que la innovación está mal gestionada, los pares tienen más confianza (72%) que los científicos (68%).
8 - La innovación está politizada en las democracias occidentales
En Estados Unidos, los republicanos son 41 puntos menos propensos que los demócratas a aceptar innovaciones como la energía verde, la IA, la medicina basada en genes y los alimentos transgénicos.
También hay grandes diferencias derecha-izquierda en Australia (23 puntos), Alemania (20 puntos) y Canadá (18 puntos).
9- Crece la demanda de privada
En la última década, se ha producido un aumento de 15 puntos en el porcentaje de encuestados que dicen que confiarían más en las empresas para la innovación si se asociaran con el gobierno - pasando del 45% en 2015 al 60% en la actualidad.
10 - La confianza en los sectores industriales no garantiza la confianza en la innovación
Existe un descuento de confianza para las innovaciones en relación con su sector: la tecnología cuenta con la confianza del 76%, pero la IA solo del 50%; la sanidad cuenta con la confianza del 73%, pero la medicina basada en la genética solo del 50%; y la alimentación y las bebidas cuentan con la confianza del 72%, pero los alimentos transgénicos solo del 32%.